El PP alerta de un incremento del 25% en el coste de la reforma del campo de fútbol de Eirís que podría obligar a licitarla de nuevo

El Grupo Popular alerta de un incremento de entre un 20 y 25% del coste en la reforma del campo de fútbol de Eirís por el incremento de precios de materiales, etc., desde su licitación y adjudicación y sin que hayan comenzado las obras, lo que podría obligar a una nueva licitación.

 

La portavoz Popular, Rosa Gallego, y el concejal Roberto García se reunieron con el presidente del club Eirís SD, Mariano Rodríguez, principal afectado por el retraso ya que tienen que entrenar en condiciones pésimas y sin iluminación. La obra sigue sin ejecutarse tras seis años de espera, a pesar de ser muy necesaria tanto para el club, con más de cien licencias, como para el resto, con más de cinco mil, que disponen de menos espacios para entrenar y jugar partidos.

 

La obra fue licitada en junio de 2020 y adjudicada en octubre de 2020 con un periodo de ejecución de 8 meses, sin que haya comenzado. El importe de adjudicación fue de 1.077.062,62 euros, ahora insuficiente por el retraso municipal, con un sobrecoste por culpa del Gobierno de entre 200.000 y 250.000 euros.

 

Este incremento se debe al retraso en la ejecución de la obra, achacable por completo al Gobierno municipal de Inés Rey y Lage Tuñas. Si hubiese comenzado cuando se adjudicó, hace un año, no habría problema, pero la demora municipal para poner a disposición de la adjudicataria todo el terreno necesario ha propiciado este incremento en una obra que debería estar finalizada.

 

Este aumento considerable del precio supondrá casi con toda seguridad la necesidad de anular la licitación inicial y licitar de nuevo la obra con el precio actualizado, ya que la modificación en el precio de un contrato no puede sobrepasar el 10%, retrasando así durante varios meses más la reforma del campo de fútbol.

 

Tras más de dos años de gobierno socialista y el paso de dos concejales de deportes, la obra continúa sin realizarse. Esta actuación ya fue anunciada por el Gobierno, pero, como otras tantas inversiones, la mala gestión de la Marea provocó que el tejido deportivo coruñés y este barrio se quedasen sin mejoras en el campo.