El PP exige a Inés Rey y José Miñones que garanticen la seguridad de los coruñeses “antes de que ocurra alguna desgracia”

El Grupo municipal del Partido Popular exige tanto a la alcaldesa, Inés Rey, como al delegado del Gobierno en Galicia, José Miñones, que garanticen de forma urgente la seguridad de los coruñeses y que den respuestas a la creciente preocupación entre los vecinos por la proliferación de casos de okupaciones ilegales y de los problemas de convivencia que se derivan de ellos.

 

La portavoz municipal, Rosa Gallego, viene constatando que, “no hay semana en la que no recibamos varias quejas de vecinos preocupados por una situación que se viene dando cada vez con más frecuencia y cada vez en más barrios”. Señala que “en muchos casos se dan claros síntomas de que la paciencia de los coruñeses está muy cerca de su límite y es necesario que se adopten medidas antes de que ocurra alguna desgracia”.

 

Añade que, pese a que A Coruña continúa siendo una ciudad segura, “seguimos a la cabeza de las ciudades de Galicia con más delitos, según los datos del Ministerio del Interior”, con un significativo aumento de un 47% en robos con violencia e intimidación o un 40% en denuncias por tráfico de drogas. “En el caso de las okupaciones ‑añade Gallego-, mantenemos una media de cinco al mes y, ante la inacción, cada vez son más los coruñeses dispuestos a tomarse la justicia por su mano. Eso es peligroso y, por supuesto, inaceptable”.

 

Rosa Gallego hizo referencia a los dos últimos casos de los que se han hecho eco los medios de comunicación: “Veíamos como la semana pasada eran los propios vecinos de Peruleiro los que actuaban contra un okupa en su barrio y hoy mismo leemos algo parecido en la zona de Os Mallos, en la calle Noia, en donde ya se produjo hace unos meses un accidente con un trágico desenlace”. La portavoz Popular recuerda que “estos casos se unen a otros ya denunciados en el Barrio de las Flores, también con un desalojo a manos de los vecinos, San Pedro de Visma, Palavea, Falperra, Agra del Orzán o A Zapateira, entre otros”.

 

En su momento, el PP había presentado sendas mociones, rechazadas en el Pleno por el resto de partidos, para aprobar una ley que ponga fin a las okupaciones ilegales y para recuperar la Policía de Barrio. “Es un clamor”, señala Rosa Gallego, que apela a la reactivación de esta figura para que, “con su carácter preventivo, contribuya a disminuir el incremento del número de delitos”.

 

Gallego califica de “propaganda de mal gusto” el anuncio realizado hace unos días por Juan Ignacio Borrego de incorporar cuatro coches patrulla para “la presunta Unidad de Convivencia y Seguridad, cuando lo realmente necesario, lo que piden casi a gritos los coruñeses es una Policía de Barrio ágil y eficaz”.

 

Recuerda la portavoz que, mientras se multiplican la quejas, “los policías locales siguen protestando todas las mañanas en María Pita para que se les dote de los medios necesarios para hacer su trabajo, y el 091 se confiesa desbordado por la centralización del servicio que provoca que las llamadas de los coruñeses sean atendidas desde otra ciudad o desviadas directamente a la Policía Local”.